El secretario general de Ben Magec Ecologistas en Acción, Antonio Rodríguez, ha denunciado el “uso privativo e ilegal” del acceso a la Playa de Abama, en Guía de Isora, así como otros tres puntos que también podrían presentar irregularidades a su juicio.
“Si antes de existir el hotel había una pista para que los usuarios pudieran llegar hasta la playa en sus vehículos particulares, ahora también tendrían que dejar bajar”, declaró a ACN Press Antonio Rodrígúez, quien añade: “Quienes único pueden desplazarse hasta el pie de playa, en una especie de carritos de golf, son los clientes», explicó.
El secretario general de Ben Magec manifestó que el personal de la empresa de seguridad del hotel Abama Golf & Spa Resort “impide que los particulares que quieren pasar un día en este rincón de la costa de Guía de Isora puedan hacerlo, ya que bloquean el acceso a los coches particulares en la pista que baja hacia la playa a la altura del hotel y los usuarios se ven obligados a aparcar a varios kilómetros de distancia”.
Rodríguez sostiene que habría que habilitar “un servicio de transporte gratuito y único, común para los clientes del hotel o cualquier otra persona, para que todos los usuarios podamos hacer uso de un lugar que está en dominio público, algo que nos recuerda, paradójicamente, un cartel que está ubicado justamente en la entrada a la zona de Abama”.
“Mientras los clientes del hotel se desplazan en sus carritos y en el funicular ubicado en la colina, que los lleva hasta la playa, los vecinos del municipio y de toda la Isla tenemos que transitar por un sendero despeñado, sin barandillas y sin ningún elemento de seguridad, si no queremos recorrer a pie la carretera que va a dar a la playa, algo que en un día de calor resulta infernal”, agregó.
Precisó que si hay acceso rodado a esta playa y es el normal para acceder a este lugar, “se tiene que habilitar y, aunque no hay normativa al respecto, porque este extremo no lo contempla la Ley de Costas, sí que lo marca la lógica, porque si la forma normal de acceder a una playa es una pista construida, pues ese acceso hay que habilitarlo”.
A ello se suma que Greenpeace, en un informe sobre la situación del litoral canario de junio de 2007, denominado ‘Destrucción a toda costa', cita entre los puntos negros del litoral tinerfeño al Hotel Abama (Guía de Isora): “multitud de irregularidades, su desaladora vierte a un Lugar de Interés Comunitario; cuatro puntos de vertido sin autorización”.
Otras zonas
Antonio Rodríguez indicó que existen otros puntos del litoral tinerfeño que presentan «posibles irregularidades por haberse privatizado y donde el público no puede acceder pese a encontrarse en dominio público, razón por la que varios particulares han denunciado”. “En la zona costera conocida como la Montaña de los Ucelay, en Barranco Hondo (Candelaria), tienen un trozo de playa cerrado con un muro. Además, existe una orden para demoler ese muro y aún no lo han hecho”, aseguró.
“También el Charco de La Vieja, por la zona del faro en Punta del Hidalgo, donde hay un club privado en cuyo interior están estas piscinas naturales, cuyo acceso han amurado por ambos lados”, señaló el secretario general de Ben Magec, quien incidió en el caso de la playa del Balayo, entre Las Gaviotas e Igueste de San Andrés. «Esta última es una gran cala de arena negra en la que se ha cerrado el acceso peatonal de la pista que va desde la carretera general hasta la costa, además de soltar perros que han mordido a personas que han intentado bajar a esta playa por el barranco anexo», explicó.
«El Opus Dei también tiene una casa en esta playa de la capital tinerfeña”. En este sentido, Rodríguez matizó que «es una pena que el pueblo desconozca la existencia de esta magnífica playa natural de la costa de Anaga por culpa del uso privativo de particulares».
