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Ecologistas en Acción de Ciudad de Almería, quiere mostrar su preocupación por el estado de abandono en el que se encuentra la puerta verde del Cordel de la Campita, situado en el paraje de la Molineta, en el termino municipal de Almería.

La puerta Verde del Cordel de la Campita, fue una actuación de restauración y puesta en valor de esta vía pecuaria, financiando con fondos europeos y realizada por la Consejería de Medio Ambiente y inaugurada hace apenas un año. Aunque en su día, Ecologistas en Acción y otros colectivos, realizamos algunas sugerencias para mejorar la actuación ambiental en la Vía de la Campita, consideramos que es un lugar idóneo para el esparcimiento y disfrute ciudadano.

Ecologistas en Acción, considera inadmisible el estado de abandono en que se encuentran las zonas verdes por la falta de regadío, la falta de poda y tratamiento en la vegetación y la proliferación de malas hierbas. Sin obviar, la falta de papeleras, puntos de agua potables e iluminación nocturna.

Estos hechos son producidos por la falta de compromiso y desidia administrativa por parte del Ayuntamiento de Almería, competente en mantenimiento de zonas verdes y la Consejería de Medio Ambiente, competente en conservación y tutela de las vías pecuarias.

Por lo tanto, exigimos a las administraciones competentes que realicen todas las gestiones oportunas para mejorar el estado de conservación y mantenimiento de la Puerta Verde del Cordel de la Campita, para evitar que los ciudadanos seamos los principales perjudicados en la falta de entendimiento y colaboración entre administraciones de distinto color político. Solo queremos disfrutar de unas zonas verdes dignas y de calidad.

Por último, queremos recordarle al Ayuntamiento de Almería y Junta de Andalucía que cumplan con los compromisos adquiridos en iniciar los tramites oportunos para catalogar y proteger todos los elementos históricos ubicados en la Molineta y en la promoción del futuro parque periurbano de la Molineta. Entendemos que los acuerdos no pueden quedar en papel mojado y las administraciones competentes deben ser consecuentes con los acuerdos adoptados democráticamente.